Los grandes incendios que ocurren en Latinoamérica
Los grandes incendios que ocurren en Latinoamérica con muertes múltiples o pérdidas multimillonarias raramente son debidamente documentados y analizados, y como consecuencia las regulaciones locales no cambian y las tragedias se repiten una y otra vez, aun cuando la solución está a nuestro alcance.
En la reunión anual más reciente de la Sociedad de Ingenieros de Protección Contra Incendios, (SFPE), en Long Beach, California, presenté un resumen de los incendios más importantes en el mundo, desde el inicio de este milenio. Tuve la no grata responsabilidad de mostrar que nos está ocurriendo a nivel regional. Casi la mitad de los 3 mil 695 muertos que están en esta lista murieron en un incendio en algún lugar de Latinoamérica.
Sin darnos cuenta nos hemos convertido en la región del mundo donde es más probable que ocurra un gran incendio con cientos de muertos; pero ¿cómo ocurrió esto? Si el consenso general era que estos grandes incendios ocurrían solo en países más avanzados, como por ejemplo estados Unidos. ¿Será una aberración estadística? Sin embargo, la realidad es que la gran mayoría de los incendios con muertes múltiples o pérdidas multimillonarias en el mundo en vías de desarrollo han pasado desapercibidos fuera de su lugar de origen y raramente son debidamente documentados y analizados.
A diferencia de EE. UU., donde hay un incendio residencial aproximadamente cada minuto en Latinoamérica las casas son en general más seguras, porque están construidas principalmente de materiales que proveen una buena compartimentación, como el ladrillo y el cemento. Tal vez esto nos lleva a pensar, equivocadamente, que tenemos menos probabilidad de que en América Latina podamos tener incendios de grandes proporciones.
Aunque es válido pensar que, desde el punto de vista residencial, estamos mejor que en Estado Unidos, país donde aproximadamente el 80% de las muertes por incendio ocurren en el hogar, no debemos asumir lo mismo en las edificaciones grandes.
En EUA, los incendios en inmuebles grandes y en la industria son cada vez menos probables y no causan un número estadísticamente significativo de muertes. Es allí, en este tipo de construcciones y estructuras, donde tenemos que fijar nuestra atención puesto que nuestra realidad es cada vez más preocupante. Es precisamente en este tipo de arquitectura, me refiero a los grandes edificios y a los procesos industriales modernos, donde estamos copiando la arquitectura y tecnología del primer mundo a pasos cada vez más acelerados y, desafortunadamente, en demasiados casos con diseños que no incluyen los requerimientos mínimos necesarios para obtener una seguridad contra incendios aceptable.
Incendios que se repiten
Por ejemplo, desde el año 2000 he documentado 12 incendios en prisiones, con más de 900 muertos en total. Todos estos tuvieron características similares (ver NFPA Journal Latinoamericano, septiembre 2012, pág. 29). En discotecas, incluyendo el más reciente incendio de la Boate Kiss en Brasil (ver NFPA Journal Latinoamericano, junio del 2013, pág. 28), he documentado siete siniestros con 550 muertos (ver lista anexa). Estos incendios en centros nocturnos tienen también características similares y problemas recurrentes: ¡Son historias de muertes anunciadas!
De manera ilustrativa, en el 2008, en el incendio en la Discoteca Factory en Quito, Ecuador, donde murieron 19 personas, se encontraban presentes características similares a lo que ocurrió en la Boate Kiss: fuegos artificiales utilizados por la banda que estaba tocando; espuma de poliuretano utilizada para insonorizar el lugar; vías de evacuación inaceptables; falta de sistemas automáticos de extinción y sobrecupo en el recinto.
El incendio de la Disco Cromañón en Buenos Aires, Argentina, con 194 muertos, pudo ser descrito casi de la misma manera como describir el incendio en Quito, Ecuador, con la gran diferencia que la ignición fue a través de una luz de bengala, utilizada por un espectador. En el incendio de la Casa de Shows Caneco Mineiro, Belo Horizonte, Brasil, donde murieron seis personas y resultaron heridas más de 150; fuegos artificiales disparados durante un show de samba iniciaron el fuego en este, que también contaba con una sola salida y estaba ocupado por mil 500 personas. Estos son algunos de los ejemplos más recientes. Solo en este milenio, repito, 550 muertos en discotecas, sin contar las decenas de otros incendios en lugares como estos con pocos decesos, que han pasado desapercibidos por nuestro radar.
Cambio en las regulaciones locales
Pero la gran tragedia, la razón por la cual estos incidentes se están convirtiendo en parte de nuestra identidad como latinoamericanos, es el estado de nuestras regulaciones locales en seguridad contra incendios, especialmente en los países más grandes (Brasil, México, Argentina y Chile). Las naciones más chicas, tal vez porque aceptan criterios de otros países más fácilmente...
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Autor: Ing. Jaime Andrés Moncada, PE, PMSFPE
Fecha Publicación: Enero de 2015
Fuente: Seguridad en América, Año/Vol. 15, No. 88, Pág. 56-57.